Betula es el nombre latino del abedul común, posiblemente derivadpo del galo betu (resina); mientras pubescens significa "peludo", por el indumento que recubre sus hojas. También se conoce habitualmente como Betula alba, término latino para blanco, por el color de su tronco.

Tiene una distribución marcadamente septentrional, poblando incluso el subártico, incluyendo Islandia y el sur de Groenlandia, mientras en la zona mediterránea solo aparece en las cordilleras y el noroeste de la Península Ibérica (Galicia, región cantábrica, Pirineos, Sistema Central, Cáucaso y Balcanes), extendiéndose por todo el norte de Europa desde el Atlántico hasta el interior de Siberia, incluyendo toda Escandinavia y el Báltico.

Muy similar al abedul común, Betula pendula, sus retoños son sin embargo lisos (sin indumento), y la aserradura del margen de sus hojas es más constante y leve. Además prefiere suelos poco drenados y saturados de agua, mientras el abedul común prefiere cierta sequedad del terreno.